viernes, 18 de noviembre de 2011

La obsolescencia de las decisiones cupulares:

La implementación de elecciones primarias dentro de la concertación, con el concurso de independientes y la constitución de una comisión nacional organizadora de primarias (CNOP), con sus órganos descentralizados (regionales y comunales), son la fiel ilustración respecto al desprestigio de las cúpulas partidarias, a la poca credibilidad por parte de la ciudadanía y la urgente necesidad de reactivar la participación ciudadana en temas electorales.
Las declaraciones de algunos diputados socialistas respecto al supuesto blindaje a Senadores son elocuentes, hoy no se puede decidir entre cuatro paredes, con los mismos de siempre y de espaldas al consolidado movimiento social. La ciudadanía quiere participación y parte mayoritaria de la Concertación está disponible para abrir los espacios y permitir el ingreso de nuevas ideas y nuevos rostros a una actividad política rechazada y desprestigiada.
A nivel comunal, las comisiones electorales comunales son la prenda de garantía para implementar el proceso de primarias de la oposición, inclusivo para cualquier candidato independiente que se sienta respaldado por la comunidad y que represente ideales en concordancia con la oposición al Gobierno, sin embargo, en este nivel hay dos problemas, el de los candidatos descolgados, que desestimando la posibilidad de someterse a primarias, pretenden levantar candidatura facilitando la elección de Alcaldes de derecha, con una evidente ambición personal por sobre el colectivo; y las discrepancias políticas internas, entre las bases constituidas de los partidos políticos y las directivas regionales. Emblemático es el caso de Yumbel, donde la Concertación omite candidatura para mantener al actual alcalde vinculado al Partido Humanista, en circunstancias que los militantes de la mayoría de los partidos de la Concertación, están solicitando primarias con un candidato propio, para el caso, Betancur.
Si queremos legitimar el proceso ante la ciudadanía, debemos respetar a las estructuras partidarias locales, incluir a todos los candidatos que se consideran oposición y permitir que también participen aquellos que están afiliados a partidos que no pertenecen a la Concertación, pero que se identifican con la oposición.
Lo que viene a continuación puede ser la validación de un mecanismo esencialmente democrático y representativo, que recomponga la credibilidad de los electores en los partidos políticos, o, al contrario, la pirotecnia mediática barnizada de democracia e inclusión, pero que sigue respondiendo a las cúpulas de siempre. Usted, siga participando.

Arthur Badilla Quiroz
Miembro de la Comisión Regional de Primarias
Consejero Regional del Partido Radical
Profesor de Historia y Administrador Público.